La tecnología frecuentemente está en evolución constante, desarrollando nuevos aplicativos, dispositivos más rápidos y nuevas versiones de software que utilizamos cotidianamente en nuestras tareas del día a día.
Poco se habla de la evolución en las buenas prácticas y manejo de la tecnología por parte de los usuarios, muchos de estos adoptan nueva tecnología sin considerar las consecuencias que podría tener el no saber manipular de manera segura un nuevo software, dispositivo o aplicativo, creando así riesgos de perdidas, robo o secuestro de información importante, que en esta época puede ser fácilmente asequible para cualquier informático mal intencionado, de no seguir los siguientes hábitos que podrían convertir a los usuarios convencionales en tecnonautas antihackeo:
1- Mantenga todo actualizado
La tecnología frecuentemente está en evolución constante, desarrollando nuevos aplicativos, dispositivos más rápidos y nuevas versiones de software que utilizamos cotidianamente en nuestras tareas del día a día
Poco se habla de la evolución en las buenas prácticas y manejo de la tecnología por parte de los usuarios, muchos de estos adoptan nueva tecnología sin considerar las consecuencias que podría tener el no saber manipular de manera segura un nuevo software, dispositivo o aplicativo, creando así riesgos de perdidas, robo o secuestro de información importante, que en esta época puede ser fácilmente asequible para cualquier informático mal intencionado, de no seguir los siguientes hábitos que podrían convertir a los usuarios convencionales en tecnonautas antihackeo:
2- Lo que no sirve, se borra:
Muchos aplicativos, programas y funcionalidades vienen instaladas por defecto en nuevos dispositivos, con frecuencia los usuarios no están enterados de que función tienen estas, pero siempre han estado allí, estos programas pueden consumir los recursos de su dispositivo, disminuyendo su rendimiento, y la no supervisión de estos programas que no se usan, podrían suponer una puerta de entrada para un ciberdelincuente.
3- Con antivirus o nada:
Un software antivirus es esencial hoy en día, gracias a la navegación desmedida e inconsciente de algunos usuarios, archivos o aplicaciones de dudosa procedencia son instaladas o descargados en los dispositivos, lo que podría suponer un riesgo a la seguridad ya que estos no son regulados ni analizados y su objetivos podrían ser distintos a los que el usuario supone, Instala un antivirus de un proveedor de confianza (directamente desde su sitio web o desde la tienda oficial de aplicaciones) y mantenlo actualizado. Esto es algo que el usuario debería hacer en todos los dispositivos inteligentes que tenga en su poder.
4- Respaldo de Emergencia:
Realiza con frecuencia una copia de los datos que consideres importantes en un dispositivo de almacenamiento remoto que se mantenga desconectado. De este modo, en caso de pérdida o robo de esa información, podrás recuperarla fácilmente.
5- «C0ntr4$eña» no es una buena idea:
Sabemos que las contraseñas son una capa de seguridad vital y que se ha fortalecido aumentando el número de caracteres, alternando mayúsculas y añadiendo caracteres especiales, en este caso evita los términos frecuentemente utilizados como contraseñas, también evita términos relacionados a tu vida personal, porque aunque sean fáciles de recordar para ti, son el camino fácil para un delincuente.
6- No confies del todo en la contraseña, autenticación en dos pasos:
Descarga una aplicación de autenticación multifactor con el fin de ayudar a proteger tus cuentas de ser secuestradas a través de ‘phishing’ y otros ataques. De este modo, aunque el criminal consiga una de tus contraseñas, no podrá acceder a tus cuentas.
7- Cuidado con las preguntas de seguridad:
Generalmente al intentar reestablecer una contraseña por medio de preguntas de seguridad, las respuestas están ligadas a la vida personal y publica del usuario; el nombre de su mascota, fecha de nacimiento de un familiar, nombre de la primera escuela, etc. Estos datos pueden ser encontrados en redes sociales y en algunos casos en bases de datos filtradas. Intenta colocar datos ficticios en las respuestas a tus preguntas de seguridad, no dejes el camino libre a los malintencionados.
Conclusión
La mejor estrategia para mantenerse a salvo de ciber amenazas es mantenerse en un nivel superior al de las amenazas actuales, como primera capa de seguridad es esencial entrenar a los usuarios y generar una conciencia segura frente al manejo de la tecnología y la información digital. Manteniendo buenos hábitos y prácticas que reduzcan el riesgo de una filtración, fuga o secuestro de datos, tanto a nivel personal, como empresarial.
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