Es cierto que la pandemia del coronavirus parece haber enseñado a la gente a lavarse las manos después de visitar espacios públicos y a dejar de tocarse la cara tan a menudo. Sin embargo, no todos parecen haber prestado atención a otro consejo útil: desinfectar los dispositivos, en particular el que sujetamos cientos de veces al día y que a menudo toca nuestra cara. Te explicamos porqué es importante limpiar tu smartphone y cómo hacerlo de forma adecuada.
Por qué debes desinfectar tu smartphone
Lo primero que debes recordar es que a temperatura ambiente el coronavirus puede sobrevivir y seguir siendo infeccioso durante varios días en el metal, el vidrio, la cerámica y el plástico. El virus puede llegar a tu teléfono de dos formas: en diminutas gotas cuando una persona infectada tose cerca de ti o por tus propias manos después de tocar picaportes, botones de ascensor y demás.
Si nunca dejas que otra persona toque tu teléfono (¿por qué ibas a hacerlo?) y no invitas a otros extraños a toserle o escupirle encima, entonces la probabilidad de infección por aire es baja. La transmisión mediante las manos depende de la duración del contacto y varía según los microorganismos; por el momento, no hay información de confianza sobre el COVID-19.
Por lo tanto, lo mejor es asumir que el virus puede transmitirse si sujetas tu smartphone después de tocar una fuente de infección y si no te lavaste las manos posteriormente. También recuerda que las manos no son el único punto de contacto: el teléfono a menudo se restriega contra la cara y las orejas cuando hablamos por él. En general, lo mejor es desinfectar tu teléfono regularmente; por ejemplo, cada vez que llegues a casa.
Cómo eliminar el coronavirus de tu teléfono
Entre los productos domésticos más comunes, los mejores para eliminar el coronavirus son el etanol (C2H5OH), el alcohol isopropílico (C3H7OH), el peróxido de hidrógeno (H2O2) y el hipoclorito de sodio (NaClO).
El alcohol isopropílico se considera el menos dañino para la cubierta oleofóbica del dispositivo, que permite que tus dedos deslicen sobre la pantalla sin dejarla cubierta de huellas. Así que decántate por este producto si es posible (en forma de aerosol o toallitas húmedas).
El etanol y el peróxido de hidrógeno deben considerarse como un plan b, una opción en caso de no haber otro producto disponible. Si se usan frecuentemente, pueden arruinar con facilidad el recubrimiento oleofóbico. Incluso podría bastar con un solo uso, dependiendo del recubrimiento, pero seguramente no quieras experimentar con la pantalla de tu teléfono para averiguarlo.
La concentración óptima es del 70-80 %. El alcohol más puro se evapora demasiado rápido y para obtener mejores resultados necesitas que la solución desinfectante se quede en la superficie alrededor de un minuto. Por tanto, concentraciones inferiores resultarán menos eficientes para la eliminación del virus. Esa es la razón por la que no puedes confiar en el vodka en vez del alcohol etílico; o en un limpiacristales en vez de alcohol isopropílico: estos compuestos tienen un contenido de alcohol inferior al 70 %.
Evita que el desinfectante entre en los conectores, altavoces y otros orificios del smartphone, incluso aunque sea a prueba de agua. En su lugar, coge un disco de algodón, mójalo en el líquido y aplícalo por todo el dispositivo. No es necesario presionar fuerte, basta con limpiar con cuidado toda la superficie.
Cuando se trata de desinfección, otra sustancia que salta a la luz es la clorhexidina; sin embargo, su protección contra el coronavirus es muy baja, así que no se recomienda en este caso.
Fuente: https://www.kaspersky.es/blog/smartphone-physical-cleaning/22250/
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